Manteca de karite
La manteca de karité es un producto natural que cada vez más se emplea en el mundo del cuidado corporal y de la cosmética. ¡Y no nos sorprende! Es un gran regenerador celular que puede ser aplicado en cualquier parte del cuerpo. En un primer momento, su textura es como si fuera cera, pero al estar en contacto con el cuerpo se convierte en un aceite, siendo un producto muy agradable y fácil de aplicar. Además, nos aporta un gran número de beneficios para nuestra piel gracias a su rica composición llena de vitaminas y minerales. Si quieres saber más sobre sus propiedades y cuáles son algunos de los productos con este maravilloso componente, quédate y descúbrelos.
Los beneficios de la manteca de karité para tu piel
1. Tiene un gran poder de hidratación y nutrición que mejora la elasticidad de la piel, a la vez que la repara y la regenera gracias a su contenido en vitamina F. Además, es un excelente agente curativo y eficaz contra quemaduras y cicatrices debido a sus vitaminas A,D,E y F.
2. Sus propiedades antiinflamatorias alivian el dolor debido a la artritis y al reumatismo. También puede actuar como descongestionante nasal si lo aplicamos en la parte inferior de las fosas nasales.
3. ¡Ideal para el cabello! Se puede usar en el cabello para aportar un extra de hidratación y protección del sol. Con su aplicación (tanto en húmedo como mojado), nuestro pelo lucirá más brillante, suave y voluminoso.
4. Es un gran protector. La manteca de karité nos protege del sol y nos previene contra posibles quemaduras solares, ya que recubre la piel con una película invisible. Además, también nos protege contra el frío, es muy efectiva para evitar el frío o humedad en las manos y en los labios.
5. Trata los problemas de estrías, arrugas, manos o talones secos o ásperos, incluso de acné.
Los mejores productos con manteca de karité
1. Si tu piel ha perdido elasticidad o suavidad, existe una con manteca de karité que posee propiedades beneficiosas tanto para la piel como para el cabello, proporcionando elasticidad para el cabello seco y dañado, y para el cuerpo suavidad y ayuda en casos de estrías.
2. Una mascarilla ideal para el cabello con este componente, te deja un pelo de lo más brillante, sedoso e hidratado.
3. ¡Para unas manos perfectas! La crema con karite nutre en profundidad la piel de las manos y combate la sequedad y grietas de la piel. Posee una textura de fácil absorción y está recomendada para toda la familia.
4. Existe un jabon con karite ideal para la limpieza diaria del rostro. Su combinación de ingredientes como el Aceite de Coco, el Aceite de Oliva, la Manteca de Karité proporcionan una limpieza delicada que deja la piel muy hidratada y suavizada. Además, su composición hace que este jabón sea apto para el cuidado de todo tipo de pieles tanto en hombres como en mujeres. El aceite de coco combate signos del envejecimiento como las estrías, nutre y restaura la piel. El aceite de oliva da elasticidad a la dermis y tiene un alto contenido en antioxidantes que ayuda a reparar las células cutáneas. Y nuestro ingrediente estrella, la manteca de karité combate el envejecimiento cutáneo estimulando el metabolismo celular y previene la aparición de arrugas. ¡Lo tiene todo para dejar un cutis perfecto!
La manteca de karité pura se ha convertido en uno de los cosméticos más top dentro de la cosmética natural y es que, su alto poder de hidratación, la convierten en el aliado perfecto para las pieles secas, muy secas y/o dañadas.
Si quieres lucir una piel sana, suave y luminosa, no dudes en empezar a usarla.
Por cierto, tener la piel hidratada a diario es uno de los deseos de la mayoría de personas, ya que la piel tiende a perder humedad y a deshidratarse con bastante facilidad.
La manteca de karité es un cosmético de origen 100% natural que se extrae mediante prensado de las semillas del árbol de karité, muy presente en el oeste de África. Hoy en día, es considerada un producto imprescindible en el cuidado de la piel, ya que es rica en ácidos grasos y, tiene propiedades curativas, antioxidantes e hidratantes.
Si algo llama la atención de la manteca de karité es su textura sólida en forma de pasta, que al entrar en contacto con la piel se derrite, convirtiéndose en aceite y absorbiéndose muy rápidamente. Además, lo mejor de la manteca de karité es que es apta para todos los tipos de pieles, ya que no irrita y respeta la barrera cutánea.
Beneficios
La manteca de karité tiene muchas propiedades para la piel ya que es rica en vitaminas A, E y F, y, además, contiene colágeno, una sustancia que juega un papel fundamental en la prevención del envejecimiento cutáneo.
- Hidrata y nutre: Hidrata, suaviza y nutre en profundidad, proporcionándole una mayor elasticidad y flexibilidad a la piel.
- Cicatrizante: Se usa mucho para tratar las quemaduras y cicatrices ya que posee propiedades suavizantes, cicatrizantes y regeneradoras. Sin duda, la manteca de karité para las estrías es una de las mejores opciones.
- Poder antiinflamatorio: No solo cicatriza, la manteca de karité también calma la piel y alivia los problemas cutáneos como irritaciones, úlceras, roces, eczemas, picaduras...
- Potente antioxidante: Su alta concentración en vitaminas A y E ayuda a proteger la piel de los radicales libres y del envejecimiento prematuro.
- Protege: La manteca de karité protege la piel de los agentes externos como el viento, el frío o el sol. ¿Cómo? Sus ácidos grasos crean una potente película protectora sobre la dermis.
La manteca de karité se puede usar para la cara, los talones agrietados, los codos muy secos, los labios deshidratados, y mucho más.
En invierno, notarás como la manteca tiene una consistencia más sólida de lo normal, como si estuviera “dura”, no te preocupes ya que es normal a causa de las bajas temperaturas. Si quieres que tenga una textura más ligera, tan solo tienes que calentarla unos segundos en el microondas o al baño maría.
Otro de los usos de la manteca de karité es hidratar las uñas. Al hidratarlas, evitarás que se rompan y aparezcan los temidos pellejitos y, además, recuperarán su brillo natural. Tan solo tienes que aplicar una cantidad muy pequeña de manteca sobre cada uña y masajear. También puedes usarla como bálsamo labial.
La manteca de karité puedes mezclarla con otros ingredientes 100% naturales como el aceite de almendras o el aceite de argán. Por ejemplo, si quieres conseguir una mezcla muy hidratante, te recomendamos mezclar manteca de karité con aceite de almendras, aceite de argán y aceite de aguacate.
Cuando hayas conseguido una mezcla ligera, uniforme y homogénea, puedes aplicarla sobre la zona del cuerpo a tratar o como mascarilla para el pelo.